En realidad, fumar no es considerado una causa determinante del fracaso de los implantes dentales, pero si es considerado un factor de riesgo. El tabaquismo que puede traer complicaciones que afecten de forma negativa el éxito de una cirugía de implantación. Entonces si eres fumador y quieres o tienes un implante dental, debes evaluar las consecuencias que pueden traer ese hábito a la salud bucal.
Una buena técnica de cepillado no puedo contrarrestar el impacto que el tabaco tiene en nuestra boca. Si bien es posible disminuir el aliento a cigarrillo, no podemos evitar que se produzcan cambios en la en el ambiente de la cavidad bucal que predispongan a desarrollar lesiones o enfermedades.
¿Pero qué tiene que ver eso con los implantes dentales? Fumar puede afectar los implantes de varias maneras, que van desde el comienzo de su implantación en la encía, hasta su calidad y durabilidad en la boca del paciente.
Fumar y el proceso de osteointegración
La osteointegración es el proceso que permite la fusión del implante dental con el hueso maxilar que le brinda soporte. De esta manera, el implante metálico puede hacer el papel de una raíz de diente. La nicotina del tabaco es vasoconstrictora, es decir, que cierra los vasos sanguíneos de nuestro cuerpo disminuyendo el flujo de sangre. Ese flujo es muy importante para mantener sano los tejidos y para la cicatrización.
Fumar antes y después de la cirugía de implantación puede comprometer la cicatrización de los tejidos de la encía que rodean al implante. La sanación puede ralentizarse, perjudicando la salud del paciente haciéndolo más propenso a infecciones.
Asimismo, en algunos casos, es necesario colocar un injerto de hueso antes de colocar el implante dental. Sin embargo, fumar se relaciona con poca absorción de calcio y huesos menos mineralizados. Los fumadores tienen más probabilidades de sufrir de pérdida de hueso y, si se trata de injerto, padecer infecciones.
El tabaquismo y la higiene bucal
Ya es un hecho comprobado la influencia del tabaquismo en el desarrollo de enfermedades periodontales. Los fumadores tienden a desarrollar más placa bacteriana y caries dentales. Los efectos nocivos del cigarrillo ayudan a la proliferación de bacterias en los dientes y a la retracción de la encía. Esto puede exponer la raíz del diente y provocar infecciones del diente y el hueso maxilar.
Esta proliferación de indeseada de sarro dental pone en riesgo también la higiene de los implantes, que si bien no desarrollan caries, la placa se pega de la corona y produce infecciones como la mucositis y la periimplantitis que pueden ocasionar la pérdida de los implantes dentales por contaminación.
¡Toma en cuenta los riesgos del tabaco! Los índices de fracaso de las cirugías de implantación aumentan con el hábito de fumar. Dejarlo antes y después de insertar un implante aumentan su durabilidad en el tiempo.
¿Te preguntas cómo puedes tener el mejor implante? Visita nuestra página y consulta nuestros servicios