Visitar al odontólogo es un compromiso que no podemos postergar eternamente. Con mucha frecuencia creemos que no debemos asistir con el especialista a menos que algo realmente grave suceda con nuestros dientes, cuando sentimos dolor o vemos sangrado en las encías. Pero si solo supiéramos los dolores de cabeza que nos podríamos ahorrar si acudimos a nuestras citas de control.
La salud bucal no es algo para tomar a la ligera. No solo porque cuando esta se ve comprometida suelen aparecer caries y placa dental, sino porque podemos terminar perdiendo toda nuestra dentadura y afectando nuestras actividades cotidianas, como comer y sonreír. Si eres de esas personas que siempre deja para otra ocasión visitar al odontólogo, seguramente no lo volverás hacer luego de conocer los peligros a los que te expones.
No lo dejes para mañana, podría ser muy tarde
En este caso la clásica frase “mejor prevenir, que lamentar” es una sabia lección. Las revisiones periódicas pueden evitar que se desarrollen complicaciones complejas que afecten la salud de nuestros dientes e incluso el resto de organismo. Si crees que te vas a ahorrar dinero o dolor al no ir con el especialista, estás muy equivocado. Suele suceder que esta actitud culmina en enfermedades difíciles y costosas de tratar.
Peligros que puedes evitar
Periodontitis
Siempre es importante practicar una excelente higiene dental, pero no es suficiente para mantener los dientes libres de placa bacteriana. Visitar al odontólogo es lo único que garantiza eliminar completamente el sarro de los dientes. La periodontitis es una acumulación severa de la placa que puede terminar en pérdida de dientes.
Caries e infecciones
Las caries son agujeros que se hacen en la corona del diente. El especialista se encarga de reparar el daño, pero cuando no asistes a revisión el daño avanza hasta alcanzar el nervio del diente. ¿El resultado? Dolor de muela y un posible tratamiento de conducto. En el peor de los casos la infección en el nervio puede llevar a un absceso y a la pérdida del diente. Además, los agujeros que causan las caries pueden debilitar tanto la corona del diente que esta se fractura.
Dificultad para digerir los alimentos
Cuando los dientes están fracturados o desgastados, masticar se hace más difícil. Los alimentos no se cortan o trituran adecuadamente y pasan hacia el estómago más enteros. Esto hace la digestión más lenta y complicada, con dolores estomacales, problemas para absorber los nutrientes y estreñimiento.
Lesiones en la encía
En el caso de las personas que utilizan prótesis, puentes o implantes dentales deben visitar al odontólogo para garantizar el éxito de sus tratamientos. La mala higiene unida a la falta de control es una de las causas principales del fracaso. Por otro lado, aunque es considerada una probabilidad, las lesiones constantes causadas por desajustes en la prótesis podrían causar cáncer de boca. Lo que podría prevenirse asistiendo a las consultas pertinentes.
¡Sé precavido! Visita a tu especialista por lo menos una o dos veces al año para tu control de rutina. Si todavía no tienes uno, podés visitar nuestra página y encontrarás todo un grupo odontológico a tu disposición.